El SEO no es una ciencia exacta, pero las técnicas de posicionamiento web, ¡funcionan!, si las aplicas correctamente. Hoy hablamos de los errores SEO más comunes y cómo evitarlos fácilmente.
La cantidad de información sobre SEO que circula por la Red es descomunal, y muchos blogueros y webmasters, sin conocimientos previos sobre el tema, acaban entrando en contacto con las técnicas de posicionamiento en buscadores.
Iniciarse en temas de SEO es muy estimulante, cuando descubres… «¡¿Cómo?! ¡¿Que puedo influir en los resultados de búsqueda de Google?!» 😉
Pero aprender requiere experimentar y adquirir experiencia, y es en ese proceso donde suelen aparecer los errores SEO más comunes.
Optimizar el SEO de una web requiere algunos conocimientos técnicos
Los fundamentos o principios básicos del SEO son muy fáciles de entender. Las complicaciones llegan cuando empiezas a poner en práctica la teoría, y comienzan a surgir los problemillas.
Es muy frecuente, en los recién iniciados, pensar que esto del SEO son cuatro cosillas de nada… meter keywords, postear con frecuencia, pedir algún enlacito a los colegas, y poco más. Pero lo cierto es que, conforme vas profundizando, te das cuenta de que el SEO requiere conocimientos técnicos que no están al alcance de todos, a menos que te propongas aprenderlos, ¡claro!
Por suerte hay muy buenos cursos de SEO disponibles para todo aquel que tenga interés, y además, leer posts como este te pueden orientar para mejorar el posicionamiento de tu página. Bueno, ¡no me enrollo más! 🙂
Los errores más comunes en SEO y su solución
1. Mantener dos versiones del dominio
Hay muchas formas de producir contenido duplicado, especialmente cuando usas un CMS como WordPress, por ejemplo. Google detesta el contenido duplicado, y esto puede empeorar tu posicionamiento.
Una de los errores más comunes en SEO, conservar dos versiones de tu dominio, con www, y sin www. Afortunadamente, tiene fácil solución, o bien estableciendo el dominio preferente en Google Webmaster Tools, o realizando un redireccionamiento desde el servidor (si eres un usuario avanzado).
Si quieres saber más sobre las distintas formas de generar contenido duplicado, y cómo evitarlo, puedes consultar la pequeña guía que publicamos al respecto en este mismo blog.
2. Abusar de las palabras clave exactas
Keyword stuffing llaman a la costumbre de sobreoptimizar o llenar una página con palabras calve. Y una de las pistas que puede activar los filtros antispam de Google es el hecho de que la palabra clave se repita de forma exacta y siempre con la misma keyword density (el mito del 2% o el 5%).
No existe una densidad de palabras clave ideal, de modo que si colocas una keyword dos veces cada 100 palabras aparezcas el primero en Google.
¡Usa sinónimos y palabras semánticamente equivalentes! Hacerlo no te supondrá perder la oportunidad de rankear. Al contrario, te protegerá de futuras penalizaciones.
¡Y no olvides usar keywords long tail! Están enfocadas a las búsquedas reales que los usuarios hacen en Internet, y al ser más concretas, te pueden proporcionar tráfico del bueno (ya sabes, el que convierte).
3. Intercambiar enlaces 1=1
Descubres un blog que te mola, te pones en contacto con el bloguero y le dices: «Oye, ¿intercambiamos enlaces?». Él te responde con un «¡¡¡si!!!», y una carita sonriente, y ya está, ¡un trabajo de SEO bien hecho! 😉
Lamentablemente, no es tan sencillo. Meter un enlace al sitio de alguien, y que ese mismo sitio te devuelva el favor con otro backlink no resulta muy natural. A Google le gusta que hagas las cosas como si no tuvieras ni idea de cómo funciona un buscador. Eso es lo que en Mountain View llaman «naturalidad».
Si intercambias enlaces por sistema, es probable que te caiga una sanción en los SERP’s.
4. Sobreoptimizar el anchor text de los links
Con Penguin al acecho, debes cuidar al máximo tu estrategia de link building. De nuevo, la apariencia de naturalidad de tus links es fundamental. ¡No enlaces siempre utilizando la keyword exacta! Utiliza también frases enteras, texto aparentemente aleatorio, nombre de marca, url, etc.
Lleva un registro de tus links para no repetir en exceso palabras clave por descuido.
5. Conseguir links externos en un footer o un blogroll
Relacionado con el anterior. Los links en el blogroll o el footer tienen un gran problema: generan un enlace con el mismo anchor text, ¡por cada página alojada en el dominio! Eso supone que tu perfil de enlaces parece corresponder con el de un blackhatero que utiliza técnicas agresivas (o más bien temerarias) de link building, aunque no haya sido esa tu intención.
En el caso de querer conseguir enlaces de este tipo, deben ir siempre con su atributo «nofollow», para que no sean tenidos en cuenta a efectos del posicionamiento por Google. Aunque un dofollow de estas características te puede meter un buen pepinazo puede llegar a ser peligroso. Un blogroll te puede llevar a la ruina o a la gloria.
6. Desatender el perfil de enlaces
Solo monitorizando tus links puedes, por ejemplo, detectar ataques de SEO negativo y poner solución a tiempo.
Para el monitoreo de links puedes utilizar herramientas como Ahrefs. ¡Es muy fácil de usar!
7. No sacarle partido a los enlaces internos
Es un error, en primer lugar, porque va en contra de la usabilidad, y priva a tus visitantes de poder pasar de una página a otra, descubriendo nuevos recursos. En segundo lugar, porque los links internos también transmiten fuerza, y te permiten distribuirla a tu voluntad dentro de tu web.
Para ampliar información puedes consultar este otro post nuestro sobre la importancia de los enlaces internos en el SEO.
8. Publicar contenidos breves
Google ha ido aumentando sus exigencias en cuanto al volumen de contenido en texto. Para posicionar bien, lo más recomendable es que publiques contenidos en tu web o tu blog que alcancen las 1000 palabras, al menos.
Esto no significa que no se pueda posicionar una página con contenidos más breves. Pero cuanto más extensos sean los posts u otro tipo de contenidos web, ¡mucho mejor!
9. Dejar sin optimizar los factores on page más básicos
Ya sea porque no le encuentran el valor a la etiqueta title, porque hayan oído que meta description no contribuye al posicionamiento, o porque no entienden la función de las etiquetas h (h1, h2, h3) en la jerarquización de la información, o por pereza, el caso es que sigue habiendo muchas páginas web y blogs sin cuidar estos aspectos del SEO on page más básico.
El SEO on page es muy importante para que un sitio sea amigable a los buscadores (y a las personas, dado que title y description, por ejemplo, son legibles para los usuarios humanos).
Los factores de SEO interno de la página mencionados aquí son, además, lugares estratégicos donde colocar las keywords por las que queremos posicionar nuestra página.
10. Tener una web que carga lento
La velocidad de carga de una página web puede no estar optimizada por varias razones:
- Imágenes demasiado pesadas.
- Un theme que tarda en cargar.
- Un hosting de mala calidad.
Es crucial testar la página web de forma periódica y comprobar si su velocidad de carga es adecuada. Se trata, de hecho, de uno de los factores más importantes para el posicionamiento en buscadores.
Lo importante, en primera instancia, es comprobar si, efectivamente, tu web carga lento. Para realizar el test puedes usar cualquiera de estas herramientas:
Además de testar la velocidad de carga de tu web, estas herramientas te ofrecen datos y consejos que te ayudarán a identificar el problema y ponerle solución.
Y bueno… Hasta aquí los diez errores SEO más comunes. ¡Hay muchos más!, ¿eh? De modo que no te sorprendas si ves aparecer una segunda parte de este post en posicionamientoweb.cat.
¿Qué otros errores de optimización SEO has notado que se repiten? No te cortes, contribuye a la lista 🙂